Esto fue afirmado por científicos de la Universidad Americana de Loma.
Según los expertos, las personas a las que les gusta tomar un refrigerio con tales productos corren el riesgo de convertirse en pacientes psiquiátricos potenciales.
Durante diez años (de 2005 a 2015), los científicos realizaron un estudio enfocado de la salud mental de 240 mil pacientes en una de las clínicas de California.
Según el resultado del experimento, el 17% de las personas con trastornos mentales son amantes de los platos de "comida rápida". Aquellos que prefieren alimentos saludables son menos propensos a los trastornos mentales.
Los expertos universitarios también establecieron una relación directa entre el consumo de azúcar y el trastorno mental bilateral, provocado por los alimentos fritos o con alto contenido de azúcar.
Debe recordarse que bajo el nombre de comida rápida se entiende un sistema alimentario que consiste en platos instantáneos vendidos en instituciones especializadas. Los platos de comida rápida se distinguen por su sabor, alto contenido de calorías y, al mismo tiempo, no importa lo paradójico que pueda parecer: nutrición insuficiente, debido al bajo contenido de fibra dietética y vitaminas B.